miércoles, 13 de junio de 2012

CERRANDO EL CÍRCULO DE LA ESTAFA



Tenemos la capacidad de asombro tan desgastada, ajada y maltrecha que, si mañana mismo, nos contaran que el presidente del gobierno no existe, que es un ectoplasma que se ha materializado en España, no le concederíamos importancia; es más, encontraríamos ahí la explicación para tantas y tantas cosas que nos están sucediendo.

Pero, a medida que mengua la facultad de sorpresa, crece a pasos agigantados nuestra indignación.  Entre unas fórmulas y otras, ya pasan de 200.000 los millones de euros que distintos estamentos europeos aportan a nuestras ruinosas cuentas (amén de los manoseados 100.000 del rescate financiero, el BCE ya ha adquirido, como mínimo, otros 100.000 de Deuda Soberana) y seguimos alimentando con generosidad a esa pariente gorrona que se nos ha instalado en casa, la famosa Prima de Riesgo, que nos está dejando la nevera más vacía que la moral de un banquero.

Se han hartado de decirnos, de acusarnos, de haber vivido por encima de nuestras posibilidades haciendo ejercicio de una irresponsabilidad por la que ahora debemos pagar.  Falso.  Poco a poco, con cuentagotas, vamos descubriendo que esas entidades financieras que nos incitaban a gastar a manos llenas no le decían la verdad ni al médico.

Las cifras del desfalco son mareantes, sólo superadas por el monto de una ambición desmedida, fuera de todo límite, que han llevado el dinero de nuestro esfuerzo a unas ignotas cuentas en paraísos fiscales mediante un entramado de falsas empresas, testaferros, entramados societarios y demás productos de una refinada ingeniería delictiva hasta que, los agujeros producidos, han terminado por socavar los cimientos de los bancos y se han venido abajo con estrépito, obligándonos a ponernos a salvo de la lluvia de cascotes envenenados.  Mientras tanto, una serie de desalmados, está contemplando la hecatombe con divertimento desde los cómodos asientos de piel de sus lujosos yates o aviones privados.

Parece que la Justicia, a su ritmo de tortuga reumática, está empezando a desperezarse y tomar cartas en el asunto para poner a buen recaudo a los verdaderos responsables (irresponsables) de esta feria del latrocinio que se ha desarrollado a nuestro alrededor pero oculta a nuestros desentrenados ojos:  Tú mira para allá que yo me lo llevo por aquí.

Ya que dicen que están levantando las alfombras, no sería descabellado que, una vez evaluada la cuantía del problema, nos pasen el análisis debidamente desglosado para conocer cuánto se ha perdido en negocios ruinosos y cuánto se ha evaporado misteriosamente en manos adhesivas para el papel moneda.

Mientras tanto, el Bobierno sigue jugando a distraernos recuperando un programa concurso de indudable éxito en nuestra niñez:

Diferentes maneras de denominar el Rescate de España. Un, dos, tres, responda otra vez: Rescate, línea de crédito, préstamo en condiciones ventajosas, ayuda europea, solución a la banca, empréstito financiero, vitaminas para los pollos…

1 comentario:

FRAN VILLARES dijo...

Lo que verdaderamente esta arruinando España, es la falta de ética de sus gobernantes y parte de sus ciudadanos, donde decirle a tus vecinos, que consigues defraudar unos euros, es motivo de aplauso y admiración. Mientras no consigamos arreglar eso, será más difícil arreglar el resto.